Carmen Baladía detalla cómo coordinó y supervisó las labores de identificación y las autopsias de las víctimas. La mochila de Vallecas, que para el Tribunal es una prueba válida enlazada con las demás bolsas-bomba de manera "directa y precisa", sí portaba gran cantidad de metralla de origen terrorista.
La que fuera directora del Instituto Anatómico Forense durante el 11-M ha vuelto a relatar con detalle cómo trabajó su equipo para identificar a los 191 muertos en la morgue instalada en Ifema. Carmen Baladía ha explicado en el programa de 11-M: La sentencia, cómo trabajaron a contrarreloj aquellos días. La profesionalidad mostrada por el equipo de forenses en una tragedia de tal magnitud impide pensar en otras cosas o venirse abajo por el dolor que a todos los ciudadanos causó el atentado: "Me daba miedo que se estropearan los cadáveres. Yo recuerdo el 11-S donde no se pudieron hacer muchísimos estudios de ADN porque las muestras estaban estropeadas , no se habían conservado a la temperatura idónea". Fue lo primero que, como directora, pensó ya que la labor forense es, o debería ser, clave en la investigación.